Por: Mundo en Conflicto

En el marco del Diálogo de Shangri-La, celebrado en Singapur, el ministro chino de Defensa, Dong Jun, lanzó una clara advertencia sobre la postura de China respecto a la independencia de Taiwán, mientras hizo un llamado a incrementar la comunicación militar con Estados Unidos.

Durante su discurso en este destacado foro de seguridad, Dong subrayó la determinación de China en impedir cualquier intento de independencia de Taiwán. “El Ejército Popular de Liberación de China siempre ha sido una fuerza indestructible y poderosa en la defensa de la unificación de la madre patria, y actuará con determinación y fuerza en todo momento para impedir la independencia de Taiwán”, declaró enfáticamente.

Las declaraciones de Dong se produjeron en un contexto de recientes maniobras militares chinas alrededor de Taiwán, y tras la asunción del presidente Lai Ching-te, a quien Pekín ha etiquetado como un “peligroso separatista”. Dong fue contundente: “Quien se atreva a separar a Taiwán de China será aplastado y sufrirá su propia destrucción”.

A pesar de las tensiones en torno a Taiwán, Dong destacó la importancia de mejorar la comunicación militar con Estados Unidos, un tema de constante fricción entre ambas naciones. “Siempre hemos estado abiertos a los intercambios y la cooperación, pero esto requiere que ambas partes se encuentren a medio camino”, afirmó.

Dong y el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, sostuvieron una reunión de más de una hora en el hotel que alberga el foro. La reunión, que contó con la participación de autoridades de defensa de todo el mundo, se considera un barómetro de las relaciones entre China y Estados Unidos. Tras el encuentro, Austin señaló que las conversaciones entre los comandantes militares de ambos países se reanudarán “en los próximos meses”, y Pekín describió las relaciones de seguridad como “estabilizadoras”.

Sin embargo, la defensa por parte de Dong del reclamo de soberanía de China en el mar de China Meridional y su rechazo al despliegue de misiles balísticos estadounidenses en la región de Asia Pacífico añadió un tono contencioso al discurso. “China ha mantenido suficiente moderación ante las violaciones de derechos y las provocaciones, pero esto tiene sus límites”, advirtió Dong en referencia al envío de misiles a Filipinas.

El despliegue de misiles estadounidenses en Filipinas, aliado clave de EE.UU. en la región, ha irritado a Pekín. En abril, el ejército estadounidense anunció el envío de un sistema de misiles de mediano alcance al norte de Filipinas para unas maniobras militares conjuntas anuales. Dong criticó esta medida, afirmando que el despliegue de “misiles balísticos de mediano alcance” está “dañando seriamente la seguridad y estabilidad regionales”.

Dong también subrayó los “límites” a la moderación de Pekín en el mar de China Meridional, haciendo referencia a una serie de enfrentamientos recientes entre buques chinos y filipinos cerca de arrecifes en disputa.

El Diálogo de Shangri-La, que se ha consolidado como una plataforma crucial para la diplomacia de defensa, continúa siendo un espacio clave para la discusión de las relaciones estratégicas en la región Asia-Pacífico, donde las tensiones entre China y Estados Unidos siguen siendo un tema central.