Por: Braian Villagra

La Estación Central de Radiodifusión de Corea del Norte emitió un reporte donde se declara que el lanzamiento del misil tenía como objetivo “adoptar una poderosa advertencia” en medio de la tensa situación con su vecino del sur y con occidente, particularmente los Estados Unidos. 

El líder norcoreano expresó su satisfacción por el positivo lanzamiento y pidió medidas más fuertes contra supuestos actos hostiles, según declaraciones difundidas por la agencia  KCNA.

“El lanzamiento es una señal clara a las fuerzas hostiles, que han avivado su imprudente histeria de confrontación militar”, Kim Jong-Un.

Kim Jong-un supervisó el lanzamiento del Hwasong-18. El misil balístico intercontinental alcanzó los 6.518 kilómetros de altitud y voló 1.002 kilómetros, alcanzando los objetivos previstos según los medios de comunicación ligados a Pionyang. Corea del Sur y Japón alertaron por el movimiento militar norcoreano. Ambos países coincidieron en que el proyectil tenía capacidad como para alcanzar cualquier punto de los Estados Unidos, Seúl y Tokio condenaron el lanzamiento. 

El misil de combustible sólido voló en una trayectoria muy elevada durante 70 minutos y cayó cerca de la isla japonesa de Hokkaido.